sábado, 10 de noviembre de 2012

ABRAZO TERAPIA


ABRAZO TERAPIA
"Hay un traje que se amolda a todos los cuerpos, un abrazo." Manoa
Quien me conoce sabe que no soy de mucho abrazar, es más ahora es posible que abrace más que antes, no me pregunten por qué, eso sí cuando lo hago es totalmente natural y sincero.
He leído que abrazar tiene enormes beneficios, como por ejemplo:
  1. Mejora el flujo sanguíneo.
  2. Genera bienestar.
  3. Proporciona seguridad y confianza.
  4. Alivia tensiones.
  5. Genera felicidad.
  6. Mejora la autoestima.
  7. Aumenta el estado de paz y armonía.
  8. Es recíproco.
  9. Alivia el alma y la acaricia.
  10. Acaricia el corazón.
Estrechar a una persona con los brazos es una de las mayores muestras de cariño y amor que se puede dar, pero según mi opinión, es un acto muy personal, no se la das a todos con la misma emoción o ganas por eso digo que debe venir natural.
Además también el abrazo cambia dependiendo de a quien estás abrazando, no es igual abrazar a un amigo que tienes tiempo que no ves, a uno que viste ayer, si abrazas a tu novi@ o si abrazas a tus padres, hijos, hermanos o sobrinos.
abrazosterapia
Un niño por ejemplo cuando abraza a su mamá suele apretar, como muestra del enorme amor que siente, mi sobrina Majo siempre que me pide un abrazo está cansada de estudiar o mimada, y le hago masajitos en la espalda suele echarse sobre mí (risas), se reconforta, se alivia.


Dicen que los abrazos son medicinales, transfieren energía y sin duda son una manera de comunicarnos, cuando damos un pésame y no sabemos qué decir, un buen abrazo basta para expresar lo que en ese momento sentimos.
Los abrazos nos hacen sentir mejor, nos llenan de felicidad y energía, pueden ser ecológicos (abrazar un árbol es genial), aleja el miedo y la soledad es decir siempre tienen un efecto positivo y saludable ya que cuando abrazamos sinceramente equilibramos nuestra energía y alejamos la negatividad de nuestro alrededor.


Hay abrazos inmensos como el de oso, abrazos con beso en la mejilla o en la boca. Con algunos abrazos puedes escuchar los latidos del corazón, abrazar al caminar o cuando vemos tv, no se necesita un lugar especial para abrazar a alguien y son gratis como las sonrisas.
¿Qué les parece si empezamos esta abrazoterapia ahora mismo, y nos cuenta que sintieron?

Fuente: http://www.inspirulina.com/abrazo-terapia.html

MEJOR DOS LENGUAS QUE UNA


por  Eli Bravo
    MEJOR DOS LENGUAS QUE UNA
    Ilustración de José Alejandro Ovalles   jaoc28@yahoo.com
    ¿Quién dijo que loro viejo no aprende a hablar? En estos últimos meses he dejado atrás el Je ne comprends pas para soltar avec plasir, pas de problème con acento marcado, pero entendible, y he podido comprobar el poder de nuestro cerebro a la hora de adaptarse y asimilar nuevas informaciones. Todavía no pienso en francés (aunque desde hace algún tiempo tengo sueños en inglés) pero a medida que avanzo con este nuevo idioma no puedo sino maravillarme con la habilidad de las neuronas para conectarse y aprender. Es algo que simplemente está en el hardware que llevamos en la cabeza.
    Si quieres un nombre técnico, llámalo plasticidad cerebral.
    En el caso de los niños sus cerebros son una verdadera plastilina. Ellos son como esponjas cada vez que su curiosidad les abre una ventana de aprendizaje. Es lo que la educadora María Montessoridenominaba la mente absorbente y que les permite asimilar un idioma como si fuera una nueva versión de Nintendo. Para alivio de quienes nacimos en el siglo pasado (y corremos un sistema operativo BASIC con varias actualizaciones a cuestas) se ha comprobado que esa capacidad de aprendizaje jamás se acaba. Menos mal.

    dos-lenguas
    En el caso del bilingüismo, existen muchos estudios que lo relacionan con mayores habilidades mentales para resolver conflictos y percibir cambios en el entorno, a la vez que desarrolla altos niveles de atención y concentración. Incluso, se dice que aumenta la densidad de materia gris y retarda enfermedades como el Alzheimer. Las razones están la "gimnasia cerebral" que significa manejar más de un idioma, pues el cerebro bilingüedebe gerenciar distintas gramáticas y adaptarse a la diversidad en la comunicación.


    Un dato interesante: pareciera que si el aprendizaje ocurre antes de los 5 años los efectos son más marcados. Pero si hace rato ya pasaste ese umbral, no te desanimes, igual se obtienen beneficios.

    Pero saliendo de la bóveda craneal, aprender un nuevo idioma (y especialmente si ocurre en otro país) resulta un fabuloso ejercicio de autoestima y humildad que nos lanza a la aventura de comunicarnos sin vergüenza. Y es que si quieres hablar otra lengua, como bien decía Platón, o corres o te encaramas. Porque resulta imposible soltar florituras verbales sin antes chapucear un montón de frases disparatadas. Pero ya lo sabemos, la pena casi siempre estorba y equivocarse es parte del proceso.

    Además, en este mundo vertiginoso, donde el éxito y felicidad cada vez más tienen que ver con nuestra capacidad de adaptación, exponernos a los cambios y aprender un nuevo idioma es una forma de salirnos de la zona de confort y zambullirnos en la novedad. Con una nueva lengua no solo aprendemos a entender el mundo con otras palabras, sino que accedemos a más información y puntos de vista. Y eso a la larga va adaptando nuestra personalidad a un mundo más globalizado.

    Y si bien algunas personas tienen especial facilidad para los idiomas, también es cierto que todos, sin importar la edad, tenemos la capacidad de aprender ¿Hacer 100 abdominales es algo que no te emociona? A mí tampoco, pero ejercitar el cerebro no duele y tampoco te pone a sudar en exceso. Lo mejor es que al final del entrenamiento te queda algo para toda la vida. ¿Tu ne crois pas?

    http://www.inspirulina.com/mejor-dos-lenguas-que-una.html
    Fuente: 

    LOS BENEFICIOS DE COMPARTIR LA CRIANZA DE LOS HIJOS


    por  Daniel Duque
      LOS BENEFICIOS DE COMPARTIR LA CRIANZA DE LOS HIJOS
      En la crianza de los hijos, los padres imparten las enseñanzas que creen que se deben desarrollar en la vida.
      Es enriquecedor compartir las tareas que el niño demanda para así influenciar positivamente en su desempeño general.
      Estudios de diversas universidades demuestran que los niños criados por varios adultos interesados en ellos (háblese de abuelos, tíos, niñeras, maestras jardineras, etc.), desarrollan personalidades más estables. En contraste, los niños criados en una familia nuclear (en la que sólo los padres comparten las responsabilidades), tienen menos modelos de resolución de conflictos a seguir.
      Mientras más opciones tengan los niños, más oportunidad tienen de ampliar su repertorio de comportamientos posibles, eso los ayuda a madurar.
      Cuando criar a un hijo cae sobre los hombros de una persona muchas veces se siente atrapada, aislada, y hasta podría sentirse frustrada. Sufre de nostalgia por la diversión, la libertad y la falta de contacto con otros adultos. Por ello, podría acumular resentimientos en contra de sus hijos.
      crianza-compartida
      En nuestra generación la mayoría de las familias tienen menos hijos, así que no ocurre lo que pasaba antes en las familias múltiples de 6 o más hijos que los hermanos se cuidaban entre sí, y que tenían que compartir los espacios, las cosas, etc.

      Hoy, hay muchos hijos que reciben "todo": tienen su propia habitación llena de juguetes y televisor, y así se hacen vulnerables, y son presa fácil de la frustración cuando se encuentran con el mundo real con todas sus barreras.
      Cuando la crianza de los hijos se realiza de manera compartida, con conciencia y amor, se dan beneficios para todas las partes. En los niños, y en los padres predominan los sentimientos amorosos y se siente satisfacción por la tarea realizada.

      Fuente: http://www.inspirulina.com/los-beneficios-de-compartir-la-crianza-de-los-hijos.html

      SOLIDARIDAD Y EMPATÍA: DIVINOS TESOROS


        SOLIDARIDAD Y EMPATÍA: DIVINOS TESOROS
        Conocido por todos es el dicho "Juventud divino tesoro". Y así es: la juventud es un tesoro aunque es bueno acotar la extraordinaria frase de Pablo Picasso: "Lleva mucho tiempo llegar a ser joven". Además de la juventud, hay muchos otros tesoros que, aunque están más escondidos, encierran un inmenso valor. La solidaridad y la empatía son algunos de ellos.
        Un texto de la Organización de Estudios Iberoamericanos sobre "Educar para la solidaridad" parte de la base de que la solidaridad es una actitud, una disposición aprendida. Por ello, no necesariamente se nace solidario sino que se aprende a serlo. Ayuda mucho criarse en una familia que la practica o tener maestros que le otorguen un rol preponderante. Si hablamos de la empatía, según Daniel Goleman padre de la Inteligencia Emocional, es "considerar los sentimientos ajenos, saber cómo decir las cosas, cómo actuar y entender el punto de vista del otro".
        Ahora bien, no se puede ocultar la disonancia que existe, aunque digamos que no es cierto, entre creer que somos solidarios y empáticos y verdaderamente serlo. Sobre todo cuando nos encontramos ante una situación donde no pensamos igual o no compartimos una decisión.
        Cuando se está evaluando o tomando la decisión de emigrar, a veces, seres queridos, familia y amigos, no entienden adecuadamente cada proceso interior por el que se está pasando y caen en el error de verlo como algo desacertado o intrascendente y no como lo que realmente representa para quien explora este camino. Por ello simplifican fácilmente soluciones, muchas veces como una demostración de un análisis menos ponderado, de evitación del tema o quizás hasta de temor. Repiten como autómatas recomendaciones que han oído o leído como si fueran parte de un recetario de cocina. Y, más aún, cuando las cosas no van como se habían planificado, formulan la desafortunada pregunta de "¿por qué no lo pensaste mejor antes de tomar la decisión?". Con este comportamiento, en vez de acompañar en este tránsito a esa persona que tanto se quiere, se genera el riesgo de crear un distanciamiento que fácilmente puede transformarse en un conflicto mayor, a veces difícil de rescatar en el tiempo.
        solidaridad-empatia
        Al emprender una búsqueda en torno a una posible decisión migratoria lo que sobran son consejos de personas quienes, aunque no han pasado por nada que se le parezca, piensan que tienen comentarios que aportar. Por supuesto que no se puede generalizar pero lamentablemente, a veces, los que son útiles son los menos. En casos como estos la intuición y experiencia previa son las mejores compañeras. Hay un dicho inglés que reza: "Straight from the horse's mouth" que traducido literalmente sería: "Directo de la boca del caballo". Desde su origen tuvo un significado muy preciso: "implica que la información es creíble, de confianza y confiable. En la esencia, esto quiere decir que la información fue obtenida de primera mano, directa de la fuente o el origen". Utilizar filtros con la información que recibimos funciona de forma eficiente en este particular, ya que nos otorga una protección indispensable para evitar confusiones innecesarias e improductivas.

        Si bien todas las cosas que importan siempre requieren un esfuerzo y de eso no nos vamos a librar, complicarte o que alguien te complique la vida no es la solución. En el otro extremo, la simplificación no es de ninguna forma la respuesta ya que sus consecuencias son muy adversas. Si alguien de tu familia o alguien querido se encuentra en un proceso de evaluar su migración o ya ha tomado esa decisión, acompáñalo desde el afecto y el cariño que le tienes. No minimices ni simplifiques sus malestares y preocupaciones sólo porque no tienes la misma opinión o lo ves desde otra óptica. Aflora tu solidaridad y tu capacidad de ser empático. Al hacerlo, para ti también habrá una ganancia.

        Fuente: http://www.inspirulina.com/solidaridad-y-empatia-divinos-tesoros.html

        No Solo Valen Los Días Buenos


        por  Eli Bravo
          NO SOLO VALEN LOS DÍAS BUENOS

          Ilustración de José Alejandro Ovalles  jaoc28@yahoo.com


          Por muchas razones nos gustan las fantasías, entre ellas, porque nos embelesan con la ilusión de una cierta perfección. También porque en su juego de espejos nos brindan la impresión de que las cosas están mejor en otro lugar. La imagen del pasto más verde en el patio del vecino es más que una zancadilla que nos hacemos nosotros mismos, porque en realidad, hojas marchitas tenemos todos. La diferencia está en cómo las fertilizamos y podamos en el momento.

          En días recientes entrevistaba a la psicóloga chilena Pilar Sordo, quien ha descollado como una de las escritoras más exitosas en temas de pareja y familia. Una mujer que debe saber muy bien cómo manejar una relación ¿verdad? Error. No fue sino tras su divorcio que entendió a cabalidad todos los factores que entran en juego en las relaciones interpersonales, y todavía, confiesa, está encontrando respuestas.

          No es secreto: son los tiempos difíciles los que traen el aprendizaje más profundo. Esto se aplica para una persona, una familia o un país. Porque en la plenitud y la bonanza el aire fresco nos acaricia pero no siempre lo valoramos. En cambio, cuando se conoce el frío y la oscuridad esa misma brisa adquiere otra perspectiva. 

          ¿Significa esto que debemos conocer el dolor para entender mejor el gozo? La respuesta está tejida en la vida misma, que en su devenir, ofrece tanto una cosa como la otra. De nuevo, la diferencia está en qué hacemos con el momento que estamos atravesando. Si nos sumergimos allí para no sacar de nuevo la cabeza lo más seguro es que nos ahogaremos. Pero también, podemos tocar fondo y salir a flote realmente transformados.

          En el universo del bienestar abunda gente que asegura tener las claves mágicas para la felicidad. También proliferan los discursos que buscan borrar los días malos, cuando en realidad, son esos días los que brindan la oportunidad de poner en práctica nuestra voluntad, compasión y equilibrio. Todo esto forma parte de un mercadeo de la plenitud que esconde la basura bajo la alfombra, sin reconocer el valor que este “sucio” tiene para nuestro crecimiento.

          Te lo digo por experiencia propia. Los últimos meses, en los que he explorado a fondo en temas de inspiración y calidad de vida, han sido también algunos de los más complicados para mí: pérdida de entusiasmo, ligera depresión, estrés económico, irritabilidad y varias visitas al terapeuta. Pero gracias a ellos he obtenido una dimensión más rica y fascinante de mi complejidad como ser humano. Y esto me ha permitido disfrutar como nunca de los días buenos, que ahora, pasado el temporal y tras un esfuerzo activo en derivar las mejores enseñanzas, puedo decir que superan con creces los malos.

          Y es acá donde está el mensaje: si lo que buscas es evitar a toda costa el dolor y el sufrimiento, estás conduciendo a toda velocidad contra una pared. Y si piensas que hay gente que ha sido capaz de saltarse las malas experiencias para llegar a un estado de iluminación ideal, estás comprando una fantasía. 

          Lo que no mata, engorda, solíamos decir en el colegio cuando se caía el sándwich al piso y rápidamente lo levantábamos para darle un mordisco. La frase era una adaptación ramplona de las líneas del filósofo alemán Friedrich Nietzsche, quien decía “lo que no me mata, me hace más fuerte”.

          Y por lo general, esos días espesos que todos tenemos no serán tan fuertes como para derrumbarnos. A menos que nos quedemos atrapados en ellos y no aprovechemos la oportunidad que nos brindan para abrir los ojos y ver la luz. Que bien vale la pena.

          Fuente: http://www.inspirulina.com/no-solo-valen-los-dias-buenos.html