sábado, 3 de noviembre de 2012

LA PROPUESTA DE AMOR PARA ESTE DICIEMBRE

12-12-12 ( La propuesta )  
!!!!!!!!!Por favor difundir esta propuesta, que llegue a todo el planeta!!!!!!!!!! enlace a compartir: http://www.youtube.com/watch?v=E3K3uPcNOAg&feature=plcp

Fuente: http://nueva-gaia.blogspot.com/

LA FÓRMULA SECRETA DEL HOMBRE MÁS FELIZ DEL MUNDO


Matthieu Ricard es un monje budista y no sólo él se reconoce como el hombre más feliz sobre la tierra. Esto fue comprobado a través de escaneos cerebrales: presenta un tamaño de la zona cerebral donde se registra la felicidad, superior al de una persona normal. Conoce su fórmula infalible.











Al parecer, la felicidad terrenal existe y hay un hombre que la ha alcanzado en plenitud: Matthieu Ricard, un francés de 66 años, quien disfruta de la felicidad plena y duradera gracias a la meditación.
Para un hombre genéticamente igual a todos, puede sonar grandilocuente el título, pero los investigadores certifican lo que él dice y lo han declarado “el hombre más feliz del mundo”.
Ricard tiene una capacidad para la felicidad jamás registrada. Y esto se ha comprobado a través de un estudio sobre el impacto de la meditación en el cerebro y las funciones de éste, realizada a practicantes avanzados de meditación. Como parte de la investigación, el neurocientífico Richard Davidson, de la Universidad de Wisconsin, aplicó un cableado con 256 sensores en el cráneo del monje.
Los escáneres mostraron que al meditar, el cerebro de Ricard produce un nivel de ondas gamma -las vinculadas a la conciencia, la atención, el aprendizaje y la memoria- "nunca antes reportadas en la literatura de la neurociencia", dijo Davidson.
También se visualizó un exceso de actividad en la corteza pre-frontal izquierda de su cerebro, en comparación con su zona derecha, dándole una capacidad anormalmente grande de la felicidad y una menor propensión hacia la negatividad, afirman los investigadores.
Alcanzar la felicidad
La investigación sobre el fenómeno, conocido como "neuroplasticidad" es bastante nueva y Ricard ha estado a la vanguardia de los experimentos innovadores, junto con otros destacados científicos de todo el mundo.
"Hemos estudiado durante 12 años los efectos de corto y largo plazo del entrenamiento mental a través de la meditación y su efecto en la atención, compasión y equilibrio emocional," dijo el investigador principal.
Davidson y su equipo encontraron resultados notables a largo plazo en todos los participantes, que hicieron 50 mil rondas de meditación, 20 minutos al día. Davidson declaró a AFP: "Es una zona maravillosa de la investigación, ya que muestra que la meditación no es sólo alcanzar el éxtasis bajo un árbol, sino que cambia completamente tu cerebro y por lo tanto cambia, lo que eres."
Los investigadores ahora están convencidos de que la meditación puede alterar el cerebro y brindar felicidad a las personas, de la misma manera que elevar las pesas mejora los músculos.
Historia de un hombre feliz
Matthieu Ricard dio la espalda a la vida intelectual de París hace 40 años y se trasladó a la India para estudiar budismo. Ahora es un confidente cercano del Dalai Lama y un respetado erudito occidental de esa religión.
Se convirtió en un monje prominente en el monasterio de Shechen Katmandú, en la India, y divide su año entre la meditación aislada, la investigación científica, los viajes con el Dalai Lama y además, Ricard da numerosas conferencias científicas.
Recientemente fue condecorado en Francia con la Orden Nacional del Mérito por su trabajo en la preservación de la cultura del Himalaya, pero es su trabajo en la ciencia de la felicidad el que tal vez mejor define a este hombre.
Consejos para ser feliz
Ricard dice sobre el arte de la meditación:
• "Es imposible detener los pensamientos que vienen, pero centrándose en un determinado sonido, o en el aliento que entra y sale, se calma la mente, dándole mayor claridad. El control de la mente no se trata de la reducción de la libertad: se trata de no ser un esclavo de sus pensamientos".
• "Si nota que su mente divaga, simplemente vuelva a concentrarse en su respiración. Esto se conoce como la atención. Usted también puede aplicarla a otras sensaciones que lo pondrán en el "ahora", en lugar de vivir en el pasado o el futuro. Usted podría centrarse en el calor, el frío y los sonidos".
• "Todo el mundo ha sentido el amor, un sentimiento que todo lo consume, y que por lo general sólo tiene una duración de 15 segundos, pero se puede aguantar y alimentar este sentimiento vívido, centrándose en él a través de la meditación".
• "Al igual que cuando se toca el piano, practicar la meditación durante 20 minutos tiene un impacto mucho mayor en el tiempo que unos pocos segundos. La práctica regular es tan necesaria como regar una planta".
• "Puede utilizar la meditación para quitar un poco de espacio a las emociones negativas".
• "Usted verá los beneficios en los niveles de estrés y el bienestar general, así como cambios en el cerebro con la práctica habitual en un mes. Aquellos que dicen que no tienen tiempo suficiente para meditar, deben buscar en los beneficios: "si usted tiene los recursos para hacer frente a todo lo demás durante las otras 23 horas y 30 minutos, meditar me parece una manera digna de pasar 20 minutos”, aconseja Ricard.
Fuente: informe21

ACEPTAR EL KARMA PARA TRANSMUTARLO


En una página de Facebook llamada "Armonizando los Sentidos (Expansión y Despertar de la Conciencia)" especialistas en la materia explican: 
"¿Que significa Karma? Es una palabra derivada del sánscrito que se traduce como "acción".
Es la ley de causa y efecto en acción, es decir es la ley que establece que nuestras acciones físicas, verbales y mentales son causas, y nuestras experiencias son sus efectos.
LA ACEPTACION DEL KARMA:

Que significa Karma? Es una palabra derivada del sánscrito que se traduce como "acción".
Es la ley de causa y efecto en acción, es decir es la ley que establece que nuestras acciones físicas, verbales y mentales son causas, y nuestras experiencias son sus efectos.

El karma o ley de causa y efecto, corresponde a la responsabilidad que nos cabe, por actos que hemos cometido en las vidas pasadas y en la vida presente. Indudablemente, estoy aludiendo a todos los actos que han tenido una connotación negativa o perjudicial, con respecto a la integridad física, psicológica y espiritual de nuestros pares. Y, por otra parte, los daños que hemos ocasionado al planeta, a la flora y a la fauna.

El Karma también representa a la "Justicia Celestial" ejercida por un Tribunal que se encargaría de impartir la Justicia Divina por nuestras acciones.
Cuando nuestras acciones dañan a otros, eso mismo que sembramos recogemos, es decir, si sembramos dolor el mismo dolor obtendremos, porque con la misma vara con que medimos a otros seremos medidos.
De nada vale querer escapar de esta ley porque es inmutable y el efecto o consecuencia que debemos padecer en el presente es proporcional a nuestras acciones pasadas.

Es por eso que para escapar de estas consecuencias tenemos que asumir nuestra responsabilidad en las situaciones que estamos atravesando en el presente, ya sea un gran dolor o sufrimiento, adversidades, pérdidas de toda índole y sobre todo cuando somos protagonistas de una serie continua de acontecimientos que se repiten invariablemente como una regla o norma que no nos permite avanzar y discurrir con libertad en ciertos aspectos de nuestras vidas.
Eso es karma por nuestras acciones pasadas, ya sea que crean o no en vidas anteriores, el karma como deuda pendiente permite explicar la causa de tanto sufrimiento cuando no hay acciones que provoquen esas consecuencias.

La forma de trascender el sufrimiento (karma) es aceptándolo y comprendiendo que para liberarnos debemos ser concientes de nuestras acciones pasadas y no quejarnos ni blasfemar para poder atraer con buenas acciones en el presente una vida próspera y colmada de bendiciones.

El karma o ley de causa y efecto, corresponde a la responsabilidad que nos cabe, por actos que hemos cometido en las vidas pasadas y en la vida presente. Indudablemente, estoy aludiendo a todos los actos que han tenido una connotación negativa o perjudicial, con respecto a la integridad física, psicológica y espiritual de nuestros pares. Y, por otra parte, los daños que hemos ocasionado al planeta, a la flora y a la fauna.

El Karma también representa a la "Justicia Celestial" ejercida por un Tribunal que se encargaría de impartir la Justicia Divina por nuestras acciones.
Cuando nuestras acciones dañan a otros, eso mismo que sembramos recogemos, es decir, si sembramos dolor el mismo dolor obtendremos, porque con la misma vara con que medimos a otros seremos medidos.
De nada vale querer escapar de esta ley porque es inmutable y el efecto o consecuencia que debemos padecer en el presente es proporcional a nuestras acciones pasadas.

Es por eso que para escapar de estas consecuencias tenemos que asumir nuestra responsabilidad en las situaciones que estamos atravesando en el presente, ya sea un gran dolor o sufrimiento, adversidades, pérdidas de toda índole y sobre todo cuando somos protagonistas de una serie continua de acontecimientos que se repiten invariablemente como una regla o norma que no nos permite avanzar y discurrir con libertad en ciertos aspectos de nuestras vidas.
Eso es karma por nuestras acciones pasadas, ya sea que crean o no en vidas anteriores, el karma como deuda pendiente permite explicar la causa de tanto sufrimiento cuando no hay acciones que provoquen esas consecuencias.

La forma de trascender el sufrimiento (karma) es aceptándolo y comprendiendo que para liberarnos debemos ser concientes de nuestras acciones pasadas y no quejarnos ni blasfemar para poder atraer con buenas acciones en el presente una vida próspera y colmada de bendiciones."

Yo agrego: No sólo "con respecto a la integridad física, psicológica y espiritual de nuestros pares y los daños que hemos ocasionado al planeta..." Sino que también se constituyen karmas cuando lo que le damos a la vida es negativo: Cuando vivimos reclamándole nuestra historia, dolores e inconformidades, cuando vivimos en depresión, sufrimiento, desprecio y amargura también sembramos eso en nuestra vida y en consecuencia cosecharemos lo mismo.

¿Por qué tenemos el pensamiento de que es la vida la que nos tiene que dar, cuando toda relación se basa en la reciprocidad? La vida es un instrumento que DIOS nos da para crecer y ya con tenerla es más que suficiente -claro que debemos abrirnos a todas las bendiciones que ella nos pueda proveer- pero es tiempo de preguntarnos: ¿Qué haremos por nuestra vida? ¿Qué haré para merecer la vida?